ESPAÑA Y LAS POLITICAS EUROPEAS EN MATERIA DE EDUCACION

Buenas blogueros! Aquí os dejo otra pequeña aportación, espero que os guste y no dudéis en comentar, será un placer conocer mas perspectivas respecto al tema!!

La Educación en España siempre ha estado en el punto de mira, en parte por la necesidad que han tenido los diferentes partidos políticos/gobiernos de crear una ley educativa acorde a su visión social/cultural, y la forma en que se debe transmitir, y por otro lado, se debe a la critica constante que se ha hecho al sistema educativo existente por su incapacidad de desarrollo. Hemos tenido 6 leyes educativas desde que se instauro el estado “democrático”. Todas ellas, encaminadas a mejorar el sistema educativo, y permitir su adaptación a las nuevas necesidades de la sociedad, pero el problema, es que todas han tenido tintes ideológicos que de una forma u otra han desembocado en la inestabilidad constante, no hay un consenso que establezca unos mínimos comunes en el ámbito de la educación.

Tras la crisis del 2008, los recortes realizados en el ámbito público, y la revolución tecnológica que se ha desencadenado posteriormente, han generado mayores necesidades en el ámbito educativo, no solo por falta de recursos, sino por la necesidad de adaptarse a las nuevas demandas, y de realizar una intervención activa dentro del ámbito de los menores. Me parece importante recalcar la necesidad de dotar de recursos económicos y materiales a las instituciones publicas de la educación, puesto que se han visto mermados en la última década y no ha existido nunca una partida presupuestaria fija que asegure de forma constante el apoyo necesario para la modernización del sistema. 

Desde la Unión Europea se desarrollan planes específicos a niveles generales que deben ser adaptados a cada país concreto, con el fin de obtener mejores resultados. La estrategia de Europa 2020, recoge una serie de medidas con la intención de mejorar el sistema educativo español. Algunos de estos objetivos son:

Objetivo Estratégico 1. Hacer realidad el aprendizaje a lo largo de la vida y la movilidad

·         Al menos un 15% de los adultos con edades comprendidas entre 25 y 64 años debería participar en aprendizaje permanente.  

·         Por lo menos el 20% de los graduados en Educación Terciaria y un 6% de jóvenes entre 18 y 34 años con cualificación de formación profesional inicial deberían pasar un periodo de estudio o formación en el extranjero

Objetivo Estratégico 2. Mejorar la calidad y la eficiencia de la educación y la formación

·         El porcentaje de alumnos de 15 años con bajo rendimiento en competencias básicas en Lectura, Matemáticas y Ciencias debería ser inferior al 15%.

·         Punto de referencia sobre lenguas extranjeras. 50% en educación primaria 75% en educación secundaria

·         El porcentaje de graduados en Educación Secundaria segunda etapa, postsecundaria no terciaria o Terciaria (CINE 3‐6) entre 20 y 34 años que se han graduado entre 1 y 3 años anteriores al año de referencia y que están empleados, debería ser por lo menos del 82%.

Objetivo Estratégico 3. Promover la equidad, la cohesión social y la ciudadanía activa 

·         Al menos el 95% de los niños/as entre cuatro años de edad y la edad de comienzo de la Educación Primaria deberían participar en Educación Infantil. 

·         Reducir el abandono temprano de la educación y la formación debería ser inferior al 10%. entre los jóvenes de 18 y 24 años de edad.

Objetivo Estratégico 4. Afianzar la creatividad y la innovación, incluyendo el espíritu emprendedor, en todos los niveles de educación y formación

·         El porcentaje de personas de edades comprendidas entre 30 y 34 años que hayan completado con éxito el nivel de Educación Terciaria debería ser por lo menos del 40%.

Si bien los objetivos marcados por la Unión Europea tienen un tinte demasiado optimista, van orientados a que se consigan los mayores avances posibles. Hay que soñar a lo grande por así decirlo, o puesto en palabras de Bruce, “el delito no es el fracasar sino tener unas aspiraciones bajas”. Es necesario que la Unión Europea, y cada país, marque objetivos posibles pero difíciles, para motivar un cambio.  Si los objetivos son insignificantes, o realmente fáciles de conseguir, hacerlo no tiene mérito, pues no genera la transformación necesaria.  

¿Y qué trasformaciones necesitamos? Esa es la gran pregunta, pero no hay una respuesta buena o mala, el plan estratégico persigue que mediante el sistema educativo se asegure la realización profesional, social y personal de todos los ciudadanos. Que los poderes públicos y la sociedad en su conjunto desarrollen una conciencia colectiva con el fin de frenar el cambio climático, se promocionen valores sociales, y se generen procesos de cohesión social para evitar la reproducción de sistemas que excluyen socialmente o reproducen la pobreza.

Y esto esta muy bien, pero ¿Cómo modificar un sistema educativo que ha sido diseñado y moldeado para unos fines concretos? Y es que, la realidad actual, nos deja claro que el desarrollo de un país depende de la educación de sus trabajadores, de la modernización de su sistema económico, y de la productividad de este. A mayor educación (conocimiento), mayor facilidad en encontrar empleo y de mejor calidad, el cual genera riqueza a nivel micro y macro, y reduce riesgos de exclusión social, pobreza y problemas derivados. El problema es que estos “fallos” se han dejado de ver como problemas, y se ven como consecuencias necesarias para el desarrollo. Es un mal por un bien mayor. Me refiero a que el sistema económico y laboral, que demanda trabajadores, cada vez es más precario, genera exclusión y pobreza, no trata de evitar el cambio climático, pero claro es a partir la educación desde donde se quiere empezar a intervenir.

Un problema importante que hay en España, es el abandono escolar, estamos muy por encima de la media europea, y es algo que debemos mejorar desde el ámbito educativo, por supuesto, para evitar que se reproduzca, que aquellos estudiantes que dejan de serlo antes de los 16 años, o que no acaban la ESO, sean un porcentaje inexistente y si los hay que sea por razones concretas, no estructurales. Las razones principales según algunos estudios son 3, por conseguir un trabajo y entrar al mercado laboral, por la percepción de que proseguir los estudios no ayuda a encontrar trabajo, o por motivos familiares. También me gustaría recalcar, que estas situaciones se dan como consecuencia de las características del entorno cercano, generalmente la familia pues en gran medida condicionan para bien, y para mal, las decisiones tomadas por los jóvenes. Un joven que deja los estudios para trabajar, lo hace porque, por un lado, el mercado demanda este tipo de trabajadores, y por otro la necesidad o situación concreta permiten que el estudiante se convierta en trabajador sin haber finalizado sus estudios. A la larga, el mercado laboral, expulsa esta mano de obra necesaria pero no cualificada en busca de nueva mano de obra no cualificada, pero con más fuerza de trabajo (más jóvenes), y generalmente, ofreciendo puestos con condiciones más precarias que las anteriores. El joven sin cualificación, ya no tan joven, pero con experiencia laboral, sale a competir al mercado con gente que no ha trabajado, pero tiene estudios que le condicionan como persona cualificada, dando una mayor continuidad al problema, que perpetua las situaciones de desigualdad y pobreza. Independientemente de tu cualificación y conocimientos, el mercado equipara a los trabajadores, por un mismo sueldo.   A mayores estudios, mayor posibilidad de adaptación al mercado, que es cambiante, frente a la población que sin grandes conocimientos, su único recurso es su fuerza de trabajo y habilidades concretas. Mi cuestionamiento es que no me parece correcto que se delegue en el sistema educativo toda la carga para solucionar el problema, cuando el mercado laboral, el sistema económico y el entorno social, están implicados en la generación del problema, pero no existe tanto interés en la adecuada intervención sobre él.

En ejemplo más es la “fuga de cerebros”, gran problema del sistema español, pues genera grandes profesionales, y el sistema económico/laboral, los rechaza. Formando profesionales de los que otras economías se benefician.

Hasta aquí por hoy

Nos vemos pronto blogueros!!

Fuente:  Objetivos Educativos Europeos y Españoles. Estrategia educación y formación 2020.  Informe Español 2013

Comentarios

  1. Totalmente de acuerdo. Creo que el sistema español tira a la basura un esfuerzo enorme de formación porque forma muy bien, pero el sistema económico y laboral español no incorpora a estos nuevos trabajadores formados. Es un problema muy gordo de generación y de adaptación económica. Siempre se dice que España va x años con retraso en y, es decir, que si de por sí y por historia ya vamos detrás, esto desde luego no ayuda en absoluto. Buen blog! Más recursos económicos para escuelas y también más asesoramiento. Molan las citas de Bruce Lee! :D

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